Las primeras lluvias no generan cambios de consideración en los cronogramas de racionamiento de agua en las 20 provincias declaradas en alerta roja por la sequía.
Azuay
En Cuenca las precipitaciones de la tarde y noche del domingo no fueron suficientes. Las crecidas de los caudales fueron súbitas porque las lluvias se dieron únicamente en zonas, sobre todo urbanas, y la lluvia cayó directamente en los ríos y no en las zonas de recargas hídricas.
Los niveles de caudales alcanzaron entre cuatro y siete metros cúbicos por segundo en los cuatro ríos de Cuenca. Pero este lunes el panorama es distinto: esos niveles descendieron debido a la severidad de la sequía.
El río Tomebamba está en estado normal con 4,03 metros cúbicos por segundo. El Yanuncay se mantiene bajo, con 1,40 metros cúbicos por segundo. Lo mismo ocurre con el río Tarqui, que apenas alcanza 1,96 metros cúbicos por segundo, y el Machángara con 1,43 metros cúbicos por segundo.
Las lluvias sí ayudaron a las plantas potabilizadoras de agua de Cuenca. No así al proyecto Nero que distribuye agua a Tarqui, Turi y Baños y por ello continúan los racionamientos en las partes altas donde los cortes van de tres y cinco horas durante el día y la noche.
Tungurahua
En Ambato la situación tampoco ha cambiado y siguen siendo las parroquias Martínez y Atahualpa las más afectadas por la sequía. En ambas, los racionamientos son de siete horas.
En Pujilí se mantienen los racionamientos en al menos 20 barrios con cortes de hasta 20 horas por día.
Pastaza
Loja
28 barrios del sur occidente de Loja siguen con racionamientos de agua potable de 14:00 a 06:00 debido a que la planta Curitroje-Chontacruz, que necesita 53 litros por segundo, solo recibe 36 litros por segundo.
Fuente: Ecuavisa